Courtois no es suficiente para el Real Madrid en Anfield

El partido que centraba las miradas de toda Europa estaba hoy en Anfield. Sobre el césped del estadio inglés se veían las caras Liverpool y Real Madrid, dos de los conjuntos con más historia y mejor currículum del panorama internacional y que ya habían sido protagonistas de auténticas batallas épicas en la Liga de Campeones.

En la memoria están el gol de Alan Kennedy que le dio el título de campeón de Europa a los ingleses y todavía tiene clavado en el pecho Agustín o la espectacular chilena de ese gran incomprendido llamado Gareth Bale. Porque hablar de Liverpool y Real Madrid es hacerlo de épica, título y galones. A la vista de muchos de los grandes enfrentamientos entre ambas escuadras durante los últimos años, el encuentro de hoy podría ser considerado como “menor”. Nada más lejos de la realidad, pues los choques entre históricos siempre conllevan algo más.

Con el claro objetivo de sumar una victoria vital que les acerque a terminar la fase de grupos entre los ocho primeros, ingleses y madrileños tenían marcado en letras rojas el choque de hoy sobre el césped de Anfield. Sin embargo, parece que los locales eran mucho más conscientes de la necesidad de sumar una victoria, pues fueron ellos los que desde el comienzo del choque salieron con el claro objetivo de llevarse la victoria.

El Liverpool sobrevive a costa del Real Madrid

En un estado de forma que genera varias dudas y le ha traído una serie de disgustos en Inglaterra en forma de malos resultados, los de Arne Slot se toparon hoy con un inconmensurable Thibaut Courtois. Porque el belga se convirtió en un monstruo de dos cabezas a los que los británicos eran incapaces de derribar. Tiros libres desde fuera del área, remates de cabeza, jugadas individuales… no había forma de batir al que actualmente es el mejor portero del mundo.

Sin embargo, el belga también es humano. Había transcurrido una hora de juego cuando el Liverpool derribó el muro belga. Fue por medio de una falta lateral botada por Szoboszlai con una mezcla de potencia y certeza que acababa en la cabeza de MacAllister. El argentino contactaba a la perfección para batir a Courtois, que era incapaz de evitar el gol local.

Con el 1-0 el Real Madrid daba un paso al frente e intentaba apoderarse del juego, pero ninguna de sus piezas se mostraba demasiado certera. Kylian Mbappé estaba lejos de su mejor versión y mostraba falta de puntería en ocasiones clave mientras Vinicius no desbordaba como es habitual. Xabi Alonso, desde la banda, buscaba unas soluciones que no llegaban y el Real Madrid suma así su segunda derrota en la temporada tras la sufrida en el Metropolitano ante el Atlético de Madrid.