Tras hacerse con los servicios del meta Kiko Casilla, los defensas Enzo Roco y Pedro Bigas y el mediocentro Iván Marcone y tras adquirir de forma definitiva al delantero Lucas Boyé, la directiva del Elche ha decidido tomarse lo que resta de mercado estival con más calma.
"Se está optimizando el tiempo. Se trabaja desde todos los departamentos para conseguir las mejores opciones. Se quieren hacer bien las cosas, sin salirse del guion, y que las cuentas cuadren y no haya sorpresas desagradables. Que exista un presupuesto reducido limita nuestras posibilidades. Se trabaja para reforzarnos y cuanto antes estén los fichajes a disposición del míster, mucho mejor", reconoció su director deportivo, Nico Rodríguez.
En declaraciones recogidas por As, el dirigente también dejó claro que la entidad no descarta cerrar alguna venta importante antes del fin de este periodo. "El deseo concreto es que los buenos se queden y que grandes jugadores, como por ejemplo Lucas Boyé, estén aquí mucho tiempo. Si es así, encantados; pero la disponibilidad económica es la que es. Por perfil de entidad en Primera debemos ser un club vendedor, eso es lo que dicen los números. Seremos uno de los tres presupuestos más bajos y eso te lleva a tener que vender por necesidad si se da el caso", concluyó.
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