El cuadro blanco cedía al galés al Tottenham en el mercado estival pero todavía tendrá un año más de contrato cuando acabe.
Nos encontramos inmersos en pleno parón FIFA y por tanto es buen momento para seguir viendo las proyecciones que todos los clubes hacen de cara a mejorar sus escuadras. Y en este caso tenemos que el Real Madrid ha decidido mover ficha para poder ir preparando sus plantillas para el futuro, al menos en los casos más espinosos.
En este caso uno de ellos será el de Gareth Bale, atacante de 31 años que regresaba al Tottenham y ya suma 1 gol en los 6 encuentros disputados hasta la fecha. Porque la escuadra londinense se decidía a pactar su cesión, asumiendo la mitad de su ficha en este caso para el combinado de Chamartín.
Planes de futuro
Como explica este jueves el diario As, el conjunto merengue ha decidido trazar ya tres planes para tener amarradas todas las posibles soluciones. El primero de los casos será que el jugador firme una gran temporada, de manera que el cuadro blanco pueda tener ofertas por él, aunque no sean muy altas a causa de que acaba contrato en 2022.
Por otro lado, podría aceptar un segundo año de cesión para marcharse libre a final de curso, si bien los spurs deberían ya asumir su ficha. La tercera vía sería un regreso, siempre y cuando Zinedine Zidane no estuviera al frente del equipo.
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