La directiva del Inter de Milán desea obtener nada menos que 50 M€ con la venta de Milan Skriniar. Su traspaso al Tottenham resulta indispensable para poder completar los fichajes que Antonio Conte aún tiene en mente.
El Inter de Milán aún no ha dicho su última palabra. Tras hacerse con los servicios de jugadores de la talla de Achraf Hakimi, Alexis Sánchez o Arturo Vidal, el cuadro lombardo trata de aprovechar los últimos compases del mercado para cerrar el fichaje de un nuevo centrocampista.
Tal y como cuenta Gazzetta dello Sport, su plan de actuación queda condicionado a la previa venta de Milan Skriniar. El eslovaco ha despertado el interés del Tottenham, pero aún está por ver si los spurs ponen sobre la mesa los nada menos que 50 M€ que desean ingresar los dirigentes lombardos.
Con dicha cantidad, el Inter podría afrontar con mayores garantías de éxito la contratación del que es, sin duda, su gran anhelo para la medular, el francés N'Golo Kante (Chelsea), y de paso reclutar un recambio de garantías para el ex de la Sampdoria. En este sentido, el rotativo pone sobre la mesa las candidaturas del inglés Chris Smalling (Manchester United), el serbio Nikola Milenkovic (Fiorentina) y el turco Ozan Kabak (Schalke 04).
Ya que es posible que la cantidad citada se quede algo corta, los directivos italianos valoran también algunas ventas que podrían dejar interesantes beneficios, como la del uruguayo Matías Vecino o la del belga Radja Nainggolan. Asimismo, la entidad también estaría dispuesta a sacrificar al croata Marcelo Brozovic o al danés Christian Eriksen.
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