Eurocopa 2016 - Cristiano falla, Portugal se ahoga: Las notas del partido

Ni Portugal, que venía de empatar ante Islandia (1-1), ni en especial Austria, que había suspendido, y con mala nota, ante Hungría en su estreno (2-0) podían permitirse un nuevo tropiezo. Ambas partían como claras favoritas para encabezar su grupo, pero tras el empate entre nórdicos y magiares en el partido precedente estaban obligadas a ganar para no comprometer su presencia en octavos de final.

Gestionó mucho mejor esta ansiedad el técnico luso Fernando Santos, quien configuró un once sin el inocuo Danilo Pereira, al que sustituyó un mucho más participativo William Carvalho, y con un Ricardo Quaresma que, pese a su intermitencia, dotó de mayor verticalidad al ataque de su escuadra. Por contra, Marcel Koller creyó que acercando a David Alaba al área rival su equipo ganaría en presencia ofensiva, pero logró todo lo contrario: eliminar de la ecuación al jugador que daba sentido a su juego. Pese a todo, los centroeuropeos pudieron hacer buena la táctica de su entrenador en el minuto 4, pero el cabezazo de Harnik, que se encontraba a un par de metros del marco y completamente solo, se marchó fuera de forma inexplicable.

Digerido el susto, Portugal se hizo con el control y fue acumulando ocasiones. En un par de ellas fue Robert Almer el que deshizo los disparos de Nani y Joao Moutinho, en otra fue un especialmente fallón Cristiano Ronaldo el que no encontró portería, y en la cuarta, la más meridiana, fue el larguero el que repelió el cabezazo del dinámico Nani. Tantas oportunidades desperdiciaron los lusos que a punto estuvo de cumplirse esa máxima del fútbol que dice que quien perdona la acaba pagando. Por fortuna para ellos, Vieirinha sacó bajo palos una falta lateral de Alaba en la que fue, por cierto, la única acción elogiable del versátil futbolista del Bayern Múnich.

La desesperación de Cristiano Ronaldo

Curiosamente, la segunda parte arrancó como la primera, con una ocasión bastante clara de Austria. Esta vez salió del pie derecho de Ilsanker, quien largó un disparó desde la frontal que tuvo que ser despejado a córner por Rui Patricio. Fue, eso sí, un espejismo, porque acto seguido Portugal recuperó el dominio y volvió a asediar el marco rival. Pudo llegar entonces el momento que tanto ansiaba CR7, pero el atacante del Real Madrid se topó en hasta dos ocasiones con un inconmensurable Robert Almer, de largo el mejor jugador de su equipo.

Con cerca de media hora por delante, Koller quiso corregir su erróneo planteamiento y envió al irreconocible Alaba al banquillo. Tal vez habría sido mejor retrasar su posición, pero el seleccionador eligió el castigo antes que la segunda oportunidad. Evidentemente, la permuta no dio sus frutos y Austria siguió sufriendo el acoso de un rival que pudo haber decantado la balanza a su favor a escasos 13 minutos para el final. Hinteregger agarró innecesariamente a Cristiano dentro del área y el colegiado señaló penalti. El madridista se relamía ante la posibilidad de ser el héroe del choque, pero su disparo se marchó al palo. Su media sonrisa, casi con la mandíbula a punto de desencajarse, reflejaba lo que todo un país sentía en ese momento.

Tras este fallo, Portugal se desinfló, pero ni aún así, ni con un rival anímicamente noqueado, Austria fue capaz de inquietar a Rui Patricio. El partido murió, por tanto, con un empate sin goles que deja a los lusos con 2 puntos y a los austriacos con apenas 1. Ambos están obligados a ganar en la última jornada para evitar una eliminación que, visto lo visto, sería un duro castigo para los peninsulares, pero un buen escarmiento para un equipo centroeuropeo que no parece ni la sombra de lo que fue en la fase de clasificación.

Las notas del partido para los jugadores de Portugal:

Las notas del partido para los jugadores de Austria:

El hombre del partido - Robert Almer

En esta irreconocible Austria, donde David Alaba puede llegar a ser situado en la mediapunta para desesperación de cualquier amante del buen fútbol, el arquero del Austria Viena se ha erigido en el gran sustento de su equipo. Frente a Hungría ya mostró un nivel aceptable, pero ha sido ante Portugal cuando ha alcanzado su máximo esplendor.

En la primera parte, realizó dos buenas intervenciones a disparos de Nani y Vierinha y en la segunda, acabó por desquiciar al mismísimo Cristiano Ronaldo con dos paradas de enorme mérito. Sólo le faltó detener el penalti, pero de eso ya se encargó el poste.