Tan centrado estuvo Jorge Mendes en cerrar el traspaso de David de Gea al Real Madrid que no pudo atender la llamada de Luis Filipe Vieira. El presidente del Benfica pretendía que el superagente favoreciera la llegada del jugador del Atlético de Madrid, Guilherme Siqueira.
La onda expansiva sigue avanzando. David de Gea no pudo recalar en el Real Madrid durante una tan frenética como esperpéntica última jornada del mercado estival y las consecuencias de su frustrado traspaso siguen salpicando a otros futbolistas tan dispares como Keylor Navas, Gareth Bale o, sorprendentemente, Guilherme Siqueira.
Según explica el Correio da Manha, el presidente del Benfica, Luis Filipe Vieira, quería que fuese el mediático Jorge Mendes el que aprovechase las buenas relaciones que mantiene con el Atlético de Madrid para favorecer el desembarco del canarinho en el conjunto encarnado. Sin embargo, sus continuas llamadas telefónicas no fueron atendidas por el agente, que se encontraba totalmente inmerso en la negociación entre el Manchester United y el cuadro de Concha Espina.
Lo curioso del caso es que el representante del carrilero no es otro que Álvaro Torres, de la empresa You First Sports, pero lejos de ponerse en contacto con él, el mandatario portugués se obcecó con un Mendes que en ese momento sólo tenía ojos para una operación que le podía resultar mucho más beneficiosa.
Aunque al cuadro rojiblanco no le vendrá nada mal la permanencia de un futbolista que podrá cubrir las ocasionales bajas de Filipe Luis, lo cierto es que la directiva tampoco habría visto con malos ojos una venta que podría haber dejado una importante cantidad de dinero en las arcas.
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