Luis Enrique pide 3 movimientos al PSG

El Paris Saint Germain se enfrenta a decisiones clave en su planificación financiera y deportiva, con tres contratos de jugadores ofensivos en el punto de mira. Según el diario francés ‘L’Équipe’, el club parisino está centrado en asegurar la continuidad de sus principales estrellas de ataque. La prioridad absoluta es la renovación de Bradley Barcola, el joven extremo de 22 años que ha despertado el interés de varios gigantes europeos. Su compromiso con el PSG parece firme, y el club trabaja para extender su contrato, que actualmente finaliza en 2028.

Barcola, quien ha sido vinculado con un posible traspaso al Bayern de Múnich, ha descartado cualquier intención de abandonar la capital francesa. Su rendimiento en la última temporada, combinado con su juventud y potencial, lo convierte en una pieza clave para el proyecto del PSG. Los rumores sobre su salida no han hecho más que reforzar la determinación del club por blindarlo con un nuevo contrato a largo plazo, asegurando así su presencia en el Parque de los Príncipes durante los próximos años.

Por otro lado, Ousmane Dembélé, de 28 años, está a punto de dar un salto significativo en términos económicos. El exjugador del Borussia Dortmund, que ya percibe un salario de 1,5 millones de euros brutos al mes, es el mejor pagado de la plantilla parisina. Sin embargo, una posible extensión de su contrato más allá de 2028 podría catapultarlo al selecto grupo de los cinco futbolistas mejor remunerados de Europa. Este movimiento reflejaría la importancia de Dembélé en el esquema del equipo y la confianza del club en su capacidad para liderar el ataque.

Varios frentes abiertos

Otro nombre en la lista es Désiré Doué, la joven promesa de 20 años que se convirtió en una de las revelaciones de la temporada pasada. Aunque su contrato, vigente hasta 2029, no representa una urgencia inmediata, el PSG ya está considerando renegociar sus condiciones. Doué ha demostrado un talento excepcional, y el club no quiere dejar pasar la oportunidad de asegurar su futuro antes de que otros equipos europeos intenten hacerse con sus servicios.

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Estas negociaciones reflejan la ambición del PSG por mantener un proyecto competitivo, pero también plantean desafíos financieros. Los elevados salarios y las posibles renovaciones podrían poner a prueba la capacidad del club para cumplir con las normativas de sostenibilidad económica impuestas por la UEFA. La dirección deportiva del PSG deberá equilibrar estas inversiones con una gestión prudente para evitar sanciones y mantener la estabilidad financiera.

Las próximas semanas serán cruciales para definir el rumbo de estas tres estrellas ofensivas. El PSG confía en que las renovaciones de Barcola, Dembélé y Doué refuercen su posición como uno de los clubes más potentes de Europa. Mientras los aficionados esperan con expectación, el club trabaja contrarreloj para blindar a sus talentos y consolidar un equipo capaz de competir por todos los títulos en la escena continental.