El Chelsea recibe calabazas por partida doble

Después de noquear al Manchester United en las semifinales de la FA Cup, el Chelsea se ha citado con el Arsenal en la gran final, todo ello porque el equipo de Mikel Arteta tumbó al Manchester City. Por tanto, habrá un nuevo derbi de Londres en la carrera por un título, situación que ya se diera el pasado curso en la batalla decisiva por el trono de la Europa League.

Mientras tanto, los Blues pretende acceder a la siguiente edición de la Liga de Campeones, todo ello sin perder de vista su plan a seguir durante la ventana de transferencias de verano. En ese sentido, Frank Lampard, técnico del Chelsea, dispondrá de dos futbolistas de plenas garantías en su parcela ofensiva a partir de la campaña que viene: Hakim Ziyech y Timo Werner, procedentes de Ajax de Ámsterdam y RB Leipzig, respectivamente.

Complicaciones con dos posibles refuerzos

Tampoco se puede obviar que, al margen de lo que suceda con el futuro más inmediato de Kepa Arrizabalaga (25 años), parece que la entidad de Stamford Bridge anhela reforzar su portería. En ese sentido, André Onana (Ajax) y Dean Henderson (a préstamo en el Sheffield United por el MU) llevan tiempo en la agenda Blue, aunque da la sensación que el favorito sería el guardián del FC Barcelona: Marc-André ter Stegen (28 años).

Asimismo, el principal objetivo de los londinenses para su retaguardia sería Ben Chilwell (23 años), carrilero zurdo del Leicester City. Según Goal.com, los Foxes harán lo indecible para retener al británico en sus filas, al igual que el West Ham United con Declan Rice (21 años), un estandarte en la medular de la escuadra encabezada por David Moyes.