Protagonista de una sensacional irrupción en el cuadro de la ciudad condal, el atacante holandés Memphis Depay ha ido bajando en sus prestaciones según han ido avanzando las semanas.
La delicada situación económica en la que se encuentra inmerso el FC Barcelona provocó que el cuadro de la ciudad condal tuviera que apostar por la austeridad durante el pasado mercado estival. Varios fueron los futbolistas que aterrizaron en el cuadro culé con la carta de libertad bajo el brazo, como son los casos del central Eric García (Manchester City) y los atacantes Sergio Agüero (Manchester City) y Memphis Depay (Olympique Lyon).
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Especialmente ilusionante fue la llegada de este último. El internacional holandés, protagonista de un rendimiento sensacional en Francia durante las últimas temporadas se convirtió en uno de los golpes más interesantes a seguir con vistas a la temporada 2021-2022. Su juego vistoso, sensacional golpeo a balón parado, facilidad para ver puerta y habilidad eran sus cartas de presentación.
Un rendimiento decreciente
El jugador de 27 años no tardó en ganarse a su nueva afición. Lo hizo dando una asistencia a Gerard Piqué en su primer partido en el Camp Nou para hacer el 1-0 ante la Real Sociedad (4-2) y marcando frente a Athletic (1-1) y Getafe (2-1). Todos los ojos estaban puestos en sus actuaciones y se convertía en el eje sobre el que giraba el juego de los de Ronald Koeman.
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Sin embargo, el ex del Manchester United se ha ido apagando con el paso de las jornadas. Todavía sin ver puerta en Liga de Campeones, hasta el pasado sábado el jugador acumulaba una racha sin goles en juego desde el 29 de agosto (sus tantos ante Levante y Valencia fueron de penalti). No cabe duda que Memphis tendrá que dar un paso al frente para que el FC Barcelona escape de su delicada situación.
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