Siempre con la vista puesta en el mañana, el Real Madrid trabaja también discretamente para planificar el porvenir de una línea de gran importancia. La portería no es un quebradero de cabeza de la entidad porque desde las propias categorías inferiores se trabaja a varios años vista.
Dentro de un mes se espera que Thibaut Courtois pueda estar ya disponible para Carlo Ancelotti pero en el Real Madrid no quieren en cualquier caso prisas. Porque además Andriy Lunin está rindiendo bien en ausencia del belga, y ha tomado la delantera a un Kepa Arrizabalaga que se irá a final de temporada.
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Es la primera decisión tomada de muchas que vendrán en el cuadro blanco en la última línea defensiva. El ucraniano ha respondido bien al desafío y esto da tranquilidad en la recuperación del ex del Chelsea para que vuelva en las mejores condiciones. Pero hay más y es que los planes no se detienen en ambos.
Un diseño de largo recorrido
El club tiene claro el futuro de su portería. Lucas Cañizres y Mario de Luis, en el Castilla ambos bajo la tutela de Raúl, apuntan a salidas este verano. Y el espigado Fran González, de casi dos metros de altura que este curso es tercer guardameta para Carlo Ancelotti de forma habitual, será el elegido como titular del filial y primera gran apuesta de futuro dentro de la entidad.
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Y después está el también ucraniano Ilia Voloshyn, fichado desde el Rayo Vallecano y con apenas 17 años ya supera los dos metros de estatura. Será el guardameta del Juvenil A, de forma que garantiza también una excelente continuidad en el diseño del futuro de la portería madridista.
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