Desde la llegada del Qatar Sports Investments a la propiedad del PSG en 2011, el conjunto parisino se ha codeado con los grandes de Europa y ha dominado la competición nacional (salvo contadas excepciones). Confiado el proyecto a Luis Enrique, el asturiano está firmando un arranque dispar en la capital gala.
Pese a lograr el objetivo de mantener a Kylian Mbappé y rodearle de grandes jugadores como Gonçalo Ramos, Ousmane Dembélé, Randal Kolo Muani o Manuel Ugarte, el PSG de Luis Enrique sigue sin arrancar. El asturiano llegaba a París para relevar a Christophe Galtier, que había conseguido levantar el título de Ligue 1 la pasada temporada.
Un enésimo mercado siendo el cuadro francés que más ha invertido para que los resultados sean, de momento, muy pobres. Así, si nos plantamos en la competición doméstica francesa, el PSG se coloca quinto, el peor arranque liguero desde que aterrizó Qatar Sports Investments (QSI) en el cuadro francés.
Europa se complica
Así, donde más se ha notado la bajada de nivel es en el ataque. En 7 partidos, los de Lucho suman tan solo 14 goles, 11 menos que respecto a la pasada temporada o 6 menos a hace dos cursos. El rendimiento defensivo también se encuentra en tela de juicio, habiendo recibido 6 goles, tercera peor marca desde la temporada 2011/2012. Sin duda, datos que el técnico asturiano deberá mejorar de cara al futuro.
En Europa la situación no es mucho mejor. Tras ganar al Borussia Dortmund en el debut europeo, el PSG se deshizo en St. James’ Park frente a otro magnate árabe como el Newcastle. Las urracas le endosaron un 4-1 a los galos, dándoles la peor victoria en fase de grupos desde la llegada del dinero catarí a las arcas del club. La temporada es larga y las notas se dan en junio, pero el inicio de curso de Luis Enrique en el Parque de los Príncipes es preocupante.
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