Primera División

Toque de atención a Jude Bellingham

La selección inglesa perdió el martes 1-3 contra Senegal y Thomas Tuchel reprimió a Bellingham posteriormente acerca de su actitud sobre el césped con algunos compañeros.

Por Pablo de la Fuente
4 min.
Jude Bellingham celebra su gol en Girona @Maxppp

Todo comienzo de una era en la que se cambia tanto respecto a la anterior suele ser difícil, y no lo ha sido menos en una Inglaterra que a los mandos de Tuchel, en esta fecha de selecciones, ha ganado por la mínima a Andorra y ha perdido contra Senegal jugando en casa.

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Las sensaciones no acaban de encontrarse y en la prensa inglesa no han tardado en llegar las críticas, aludiendo a que el alemán no se va a atrever a llevar a cabo el cambio de ciclo prometido, ya que sigue convocando a nombres que parecían ya descartados, como Jordan henderson o Ivan Toney.

En el centro del campo, Jude Bellingham está llamado a ser el líder de esta generación, esta vez en un rol más cercano al mediocentro, actuando como doble pivote, como ya hiciera en el Borussia Dortmund cuando coincidió con Tuchel. La confianza de Thomas en él es ciega, pero también lo es la exigencia, y en una entrevista concedida a Talksport, no dudó en criticar la actitud de la estrella madridista durante los partidos.

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En esa derrota contra el combinado africano, se volvió a ver al Jude irascible y protestón, con ese fuego interior que suele transformar en acciones decisivas, pero que a veces le juega malas pasadas, como se pudo ver en la expulsión de esta misma temporada contra Osasuna.

En ese sentido, Tuchel ha aclarado que es bueno que tenga esa pasión por ganar, pero que la forma de mostrarla puede llegar incluso a intimidar a algunos de sus compañeros, y que debe trabajar ese aspecto de su personalidad para que no sea contraproducente para el equipo.

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La declaración en concreto fue la siguiente: “Creo que sus reacciones crean un mix de emociones. Un ejemplo es mi propia madre, a veces ella, a través de la televisión, no ve ese chico educado y simpático que conozco yo. Si sonríe, se gana a todo el mundo, pero a veces ese hambre por ganar se expresa de una forma que puede ser repulsiva para el resto”.

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