El fichaje que dispara al Borussia Dortmund estaba en casa
El Borussia Dortmund sonríe. Y lo hace en gran medida después del exitoso regreso de Nico Schlotterbeck. El zaguero volvió a los terrenos de juego y disputó los noventa minutos después de meses de ausencia.

Los augurios no eran los mejores. La lesión de Nico Schlotterbeck en abril pasado fue, para muchos, el golpe definitivo a las ambiciones del Borussia Dortmund en la Champions League. Sin embargo, el BVB logró un histórico sprint final sin su pilar defensivo y aseguró su plaza en la máxima competición europea.
No obstante, la semana pasada, ante la Juventus de Turín, quedó patente cuánto se echaba de menos al jugador de mentalidad fuerte, cuando una ventaja de 4-2 se esfumó en el tiempo añadido. Expertos y aficionados coincidieron: “¡Con Schlotterbeck eso no habría pasado!”. No contar con uno de los mejores sobre el césped fue clave para el empate in extremis de la Vecchia Signora en su estadio.
La importancia del que está llamado a ser el próximo capitán quedó clara este domingo. “Se nota lo crucial que es para estabilizar esta defensa”, celebró el entrenador Niko Kovac ante el micrófono de ‘DAZN’. “Ha tenido que trabajar mucho, no fue una lesión fácil. Tuvo que esforzarse para volver también mentalmente tras un tiempo de baja tan largo. No es sencillo para un chico tan joven. Ha sido un regreso espectacular, felicidades al equipo de rehabilitación. Así es como me imagino el regreso de un lesionado de larga duración: que pueda rendir al máximo durante 90 minutos, y hoy ha sido un gran ejemplo”.
El regreso de Schlotterbeck devuelve la sonrisa
Inicialmente, se estimó que estaría de baja hasta finales de octubre, pero gracias a una rehabilitación exprés, el plazo se acortó a finales de septiembre. El objetivo era que regresara para la segunda jornada de la Champions League la próxima semana, pero finalmente lo hizo dos jornadas antes en la Bundesliga.
El propio Schlotterbeck se mostró sorprendido por la rapidez de su vuelta: “El entrenador me preguntó ayer si tenía ganas, y como futbolista no dices que no. Que fueran 90 minutos fue muy duro, pero bueno, para eso se trabaja”. El efecto Schlotterbeck fue evidente contra el Wolfsburgo. Sin el zaguero de 25 años, los aurinegros probablemente no habrían mantenido la ajustada ventaja de 1-0 hasta el final. Aunque los locales contaron con algo de suerte, cuando un disparo de Koulierakis no cruzó completamente la línea de gol por milímetros (58’). Una jugada que solo la tecnología de línea de gol pudo esclarecer, imperceptible para el ojo humano.
Schlotterbeck mejora a sus compañeros. Waldemar Anton destacó el “partidazo” de su colega, subrayando que “no es algo habitual estar tan concentrado durante 90 minutos tras seis meses de baja”. Además de Anton y Kovac, es probable que el seleccionador nacional, Julian Nagelsmann, también se alegre por esta nueva solidez defensiva.
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