Ofertón para el fichaje de Bruno Fernandes

La Premier League lleva tiempo siendo uno de los mercados en los que los grandes tiburones de Arabia tratan de tentar a sus jugadores con suculentas ofertas económicas para mejorar la competitividad de su campeonato. Koulibaly, Mitrovic, Jhon Durán… El patrón se repite y en este próximo mercado de verano el elegido es Bruno Fernandes.

La fórmula planteada siempre es la misma, o firmar a jugadores cercanos a la treintena que son conscientes de que solo les queda un gran contrato en la élite, o tentar a jóvenes promesas que tienen toda la carrera por delante, y el portugués, pese a no cobrar nada mal en el Manchester United, entra dentro del primer grupo.

Bruno Fernandes lleva dando la cara por el United desde que llegó al club. Para que la relación entre un club y una gran estrella se estabilice en el tiempo, ambos tienen que estar a la misma altura, y Bruno, desde hace tiempo, está en una dimensión como mediapunta a la que el United, que lleva sin ganar la Premier League 12 años, no puede aspirar.

El desgaste es su carta

Ese desgaste, que se puede haber convertido en frustración, es la bala a la que se agarra el Al-Hilal, que le arrebataría el fichaje a un Al-Nassr que ya trató de incorporarle a su disciplina en cursos pasados. Con la reciente llegada de Amorim, si bien Bruno antes ya era la cara del United, ahora es pieza capital suponiendo la prolongación de su compatriota en el campo.

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Según comenta el periodista especializado en fichajes, Fabrizio Romano, a día de hoy Bruno Fernandes no tiene ninguna intención de salir de Old Trafford, pero es una realidad que el interés de Al-Hilal está ahí, por lo que la tentación siempre la va a tener presente. No ha habido contactos entre clubes, ni siquiera aproximaciones, por un jugador que acaba contrato en 2027, con opción a otro año más.

Por último, hay que contar con que el dinero nunca ha sido problema para el United. Al no tener una necesidad imperiosa de vender, gracias, en parte, a la reciente inversión de Jac Ratcliffe en el club, pueden permitirse el lujo de rechazar ofertas millonarias sin pensárselo dos veces, con tal de mantener a su capitán liderando la nave de Amorim.