El director deportivo del Wolfsburgo explica el porqué de la marcha de la estrella belga Kevin de Bruyne en dirección al Manchester City.
74 M€. Esta es la espectacular cantidad que el Manchester City pagó el pasado verano para hacerse con los servicios del centrocampista belga Kevin de Bruyne. Pese a una anterior experiencia fallida en la Premier League, el conjunto dirigido por Manuel Pellegrini decidió poner toda la carne en el asador a fin de convertir al belga en uno de los grandes fichajes del verano.
Su excelente temporada pasada en las filas del Wolfbusrgo (16 goles y 28 asistencias en 51 partidos) provocó que varios de los conjuntos más importantes de Europa como el Bayern Múnich lanzaran sus garras sobre él, disparando su tasación. Y fue precisamente el potencial económico de los del Etihad Stadium lo que terminó por decantar la balanza a su favor.
Así lo explica precisamente Klaus Allofs, director deportivo de la escuadra alemana. En una entrevista concedida a Die Welt, el directivo apuntó que «Hay clubes que no tienen límites a la hora de invertir y es complicado para entidades como la nuestra confirmar la continuidad de nuestros mejores futbolistas».
Además, Allofs no dudó en añadir que la joven estrella belga (quien ya suma 3 goles desde que regreso a Inglaterra) ha visto multiplicado su salario por cuatro en el Manchester City. Realmente, ¿quién podría resistirse?
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