Pese a ser muy superior durante los primeros 45 minutos, disfrutando de una renta con los goles de Rui Silva (en propia puerta) y Álvaro Morata, el Atleti acabaría pidiendo la hora. William Carvalho reengancharía al Betis con una diana sensacional, al tiempo que Jan Oblak sería clave con una parada salvadora en los últimos instantes.
Después de verse completamente desbordado por un Athletic Club que fue un ciclón, el Atlético de Madrid se ha quedado sin la opción de competir en la gran final de la Copa del Rey. Con la esperanza de poder dar la vuelta a la tortilla contra el Inter de Milán en los octavos de Champions, el conjunto de la capital de nuestro país pasaría a la acción este fin de semana en el entorchado doméstico. A saber, se vería las caras con las del Real Betis en el Cívitas Metropolitano.
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Diego Pablo Simeone se presentaría de entrada con un Jan Oblak que no pudo obrar un milagro ante el aluvión de ocasiones de los leones en San Mamés (en Copa). El muro esloveno tendría por delante un sistema de tres centrales, compuesto por Gabriel Paulista, Axel Witsel y Mario Hermoso. Los carriles serían para Marcos Llorente y Samu Lino, concediendo la medular a Rodrigo De Paul, Koke Resurrección y Pablo Barrios. En punta de lanza, la dupla de Álvaro Morata y Memphis Depay.
En cuanto a la disposición táctica esbozada por un estratega de la magnitud de Manuel Pellegrini, el encargado de echar el cerrojo a sus dominios sería Rui Silva. Este cancerbero estaría resguardado en la parcela defensiva por cuatro piezas del nivel de Héctor Bellerín, Germán Pezzella, Chadi Riad y Youssouf Sabaly. El doble pivote correría a cargo de Johnny Cardoso y Marc Roca, mientras que Pablo Fornals, Rodri Sánchez y Chimy Ávila se asociarían con Willian José.
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Jan Oblak se reivindica con una soberbia intervención
La primera aproximación del choque la firmaría el Chimy, aunque sería un mero espejismo porque la iniciativa sería total de los madrileños durante el acto inaugural. Lino y Barrios realizarían una precisa combinación ofensiva, aunque no conseguirían desbordar a Bellerín. De Paul no sería capaz de sacar partido del desajuste verdiblanco, aunque la mala fortuna se cebaría poco después con los visitantes. En concreto, con la diana de Rui Silva en propia meta (1 – 0).
Un arquero que, no obstante, se sacaría instantes más tarde esa espina con una doble intervención de mucho mérito ante Memphis. Por si fuera poco, en una pena máxima concedida a instancias del VAR, Rui Silva adivinaría las intenciones de Morata para atajar el chut desde el punto fatídico. Cardoso intentaría poner la réplica, pero sin apenas inquietar a Oblak. Sin embargo, la superioridad seguía siendo manifiesta a favor de un Atleti que iba lanzado. Una renta que, además, estiraría un Morata que se sacudiría de encima la presión y la ansiedad al mandar el cuero al fondo de las mallas antes del descanso (2 – 0).
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Al volver del túnel de vestuarios, Pellegrini agitaría el árbol con Guido Rodríguez y William Carvalho en detrimento de Marc Roca y Rodri. Willian José probó fortuna con un remate, aunque sería Carvalho el que recortaría distancias con una diana de muy bella factura (2 – 1). A continuación, un imperial Pezzella frenaría a un Morata que ya se relamía en boca de gol. Y qué decir de la fabulosa parada de un Oblak que salvaría a los suyos con una acción prodigiosa. Así las cosas, el Atleti se llevaría los tres puntos a costa del Betis.
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