Una solitaria diana de Marco Asensio ha sido suficiente para dejar los tres puntos en el Santiago Bernabéu. Así las cosas, el cuadro azulón deberá seguir remando para eludir el descenso a Segunda División.
Si todo sigue el curso normal de los acontecimientos, el Real Madrid cederá pronto su corona liguera en favor de un FC Barcelona que ya saborea el alirón. Sin embargo, el flamante campeón de la Copa del Rey cuenta con el desafío de volver a reinar en Europa. Para ello, deberá tumbar al Manchester City de cara a disputar otra final de la orejona. En esta ocasión, retomando el entorchado doméstico, mediría sus fuerzas con las de un Getafe que suspira por la salvación.
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Como era previsible, Carlo Ancelotti tiraría de rotaciones para guardar fuerzas con vistas a la cita del miércoles con los Sky Blues. Thibaut Courtois sería su guardián bajo palos, quedando escoltado a las mil maravillas por Lucas Vázquez, Éder Militao, Nacho Fernández y Ferland Mendy. En la parcela ancha, Aurélien Tchouaméni, Dani Ceballos y Eduardo Camavinga, dejando la vanguardia al trío de ases de Fede Valverde, Eden Hazard y Marco Asensio.
Por lo que respecta a José Bordalás, quien ha reemplazado en el cargo a Quique Sánchez Flores, contaría con David Soria para frenar las acometidas de su rival. Por delante, un sistema de tres centrales compuesto por la contundencia de Djené Dakonam, Omar Alderete y Stefan Mitrovic. Los carriles serían para Juan Iglesias y Gastón Álvarez, estando flanqueados por Portu, Nemanja Maksimovic y Carles Aleñá. En punta de lanza, la dupla de Jaime Mata y Borja Mayoral.
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Marco Asensio resuelve un duelo descafeinado
El partido no pasará precisamente a los anales de la historia de esta disciplina. Por un lado, el 14 veces ganador de la orejona no forzaría en ningún instante. Mejor dicho, los actores secundarios (salvo contadas excepciones) no tendrían esa capacidad de reivindicarse sobre el tapete verde. Por el otro lado, lo cierto es que el cuadro azulón firmaría el empate prácticamente desde el pitido inicial. Sin embargo, esa apuesta es muy arriesgada en un escenario como el Santiago Bernabéu.
Maksimovic, Aleñá y Gastón no estarían certeros con sus respectivos lanzamientos. Por su parte, Lucas Vázquez llevaría a cabo una magnífica maniobra, mientras que Courtois realizaría una soberbia parada (a mano cambiada) para echar el cerrojo a sus dominios. Superado el ecuador de los segundos 45 minutos, Asensio rompería la paridad en el luminoso con un golpeo que sería desviado (la trayectoria) por un rival (1 – 0). Vinícius se quedaría con la miel en los labios al marcar en fuera de juego, pero el Real Madrid doblegaría al Getafe por la mínima.
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