En un partido que no pasará precisamente a los anales de la historia del deporte rey, la irrupción de Tigrinho ha sido clave para dejar los tres puntos en la Ciudad Condal. Un atacante que, de hecho, también participaría en la acción que propiciaría la expulsión de Unai García.
Contienda correspondiente a la vigésima parada del calendario de la élite del balompié nacional, un compromiso que se aplazó con motivo de la disputa de la Supercopa de España. Así las cosas, el FC Barcelona deberá realizar un ejercicio de personalidad después de quedarse a un océano de distancia de Girona y Real Madrid en la carrera por el entorchado liguero. Tras la goleada encajada contra el Villarreal, el combinado catalán se había citado con Osasuna.
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Xavi Hernández se presentaría de entrada por un Iñaki Peña que confiaba en reivindicarse después de dejar serias dudas en sus últimas actuaciones. Un cancerbero que, además, quedaría resguardado en su entramado defensivo por cuatro piezas de la magnitud de Jules Koundé, Ronald Araujo, Pau Cubarsí y Joao Cancelo. La creación del juego correspondería a Frenkie de Jong, Ilkay Gündogan y Pedri, otorgando el ataque a Lamine Yamal, Ferran Torres y Robert Lewandowski.
Por lo que respecta a la disposición táctica de Jagoba Arrasate, presentaría alguna que otra rotación en su esquema. El guardián de sus dominios sería Aitor Fernández, apostando por un sistema de tres centrales con Jorge Herrando, Unai García y David García. La profundidad en los costados llegaría con Jesús Areso y Johan Mojica, concediendo la parcela ancha a Lucas Torró, Aimar Oroz y Jon Moncayola. En punta de lanza, la pareja de baile de José Arnaiz y Ante Budimir.
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Tigrinho ya festeja con el FC Barcelona
La contienda arrancaría de forma negativa para los culés, todo ello a raíz de la lesión muscular de un Ferran que sería reemplazado por Fermín López. Pedri se estaba mostrando con ganas en el doble pivote con Frenkie, dejando a Gündogan más adelantado (como mediapunta). Aun así, las ocasiones brillarían prácticamente por su ausencia a lo largo de los 45 minutos iniciales. De hecho, las únicas acciones con cierta sensación de peligro llegarían a balón parado merced al ímpetu de Koundé en el Estadio Olímpico de Montjuic.
En cuanto a los pamplonicas, se quedarían cerca de aprovechar algún que otro desajuste de su rival, en concreto con la insistencia de Arnaiz y Budimir. Fermín estaba activo con diversos desmarques de ruptura, tratando de percutir desde segunda línea. Al volver del túnel de vestuarios, el protagonismo giraría en torno a un Vitor Roque que se desataría con su primer zarpazo como culé (1 – 0). Un Tigrinho que forzaría la expulsión de Unai, aunque Osasuna no perdería la cara al partido en inferioridad numérica. Lewy vería portería en fuera de juego, aunque el Barça lograría los tres puntos con sufrimiento.
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