En un partido de vital trascendencia en la lucha por el título, el vigente campeón inglés ha sido realmente superior al cuadro de Londres. Una merecida victoria que, además, ha estado guiada por un brillante Kevin De Bruyne.
Partido con aroma a final en el frenético pulso por el trono de una Premier League que está que arde en la consecución de los diferentes objetivos de sus participantes. Dicho lo cual, las espadas se situaban en su punto más elevado con motivo del envite directo entre los dos mejores clubes de esta temporada. A saber, el Manchester City va a apurar sus opciones para conquistar su tercera corona consecutiva. En cuanto al Arsenal, el alumno pretende tomar el testigo de su maestro.
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Pep Guardiola se presentaría en este esperado partido con un Ederson Moraes que entiende a las mil maravillas el estilo de juego implementado por el de Sampedor. Un cancerbero brasileño que, dicho sea de paso, estaría acompañado a la perfección por cuatro piezas del nivel de Kyle Walker, Rúben Dias, John Stones y Manuel Akanji. Rodri haría de ancla, dando mucha libertad a Bernardo Silva, Ilkay Gündogan, Kevin De Bruyne y Jack Grealish. En punta de lanza, Erling Haaland.
En cuanto a un Mikel Arteta que se reencontraba con Pep, tendría en su arco a un Aaron Ramsdale que se vería sometido a un acoso y derribo casi desde el pitido inicial. Pasando a su entramado defensivo, el cancerbero contaría con el apoyo de Ben White, Rob Holding, Gabriel Magalhaes y Oleksandr Zinchenko. Granit Xhaka y Thomas Partey ocuparían el doble pivote, mientras que Bukayo Saka, Martin Odegaard y Gabriel Martinelli se asociarían con Gabriel Jesus.
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Un rodillo liderado por Kevin De Bruyne
Los Sky Blues realizarían una auténtica declaración de intenciones con una salida en tromba para encerrar a su adversario. En una de esas primeras acciones, De Bruyne haría gala de su preciso golpeo del esférico con un lanzamiento desde fuera del área (1 – 0). Una acción en la que nada podría hacer Ramsdale, quien evitaría una sangría mayor con su espectacular repertorio de intervenciones. En concreto, estaba siendo un quebradero de cabeza para Haaland.
Cuando agonizaban los 45 minutos inaugurales, en una jugada que sería corroborada a instancias del VAR, Stones ampliaría la renta de los locales para satisfacción de su parroquia (2 – 0). Ramsdale volvería a frustrar a Haaland, pero el cíborg noruego serviría el cuero en bandeja para el doblete de un desatado Kevin De Bruyne (3 – 0). Holding maquillaría el resultado (3 – 1), pero el City da un golpe encima de la mesa para imponerse al Arsenal en la lucha por el trofeo de la Premier con la sentencia de Erling (4 – 1).
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