Ligue 1

Fabinho, el descarte del Real Madrid que ahora brilla en Francia

El ahora jugador del Mónaco se ha convertido en una de las grandes sensaciones del comienzo de temporada merced al nivel que ha mostrado en los primeros encuentros de Ligue 1.

Por Iván Vargas
2 min.
AS Monaco Fábio Henrique Tavares @Maxppp

Pese a que todos los ojos estaban puestos en otras de las millonarias incorporaciones de Radamel Falcao, James Rodríguez, Joao Moutinho o Jeremy Toulalan, el Mónaco está siendo también testigo de la explosión de un joven lateral diestro de apenas 19 años llegado en calidad de cedido durante el pasado mercado estival.

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Concretamente, se trata de Fabinho, futbolista que el pasado curso llegó al Real Madrid también en préstamo desde el Rio Ave y el cual disputó un total de 30 partidos (2 goles) en las filas del segundo equipo merengue e incluso llegó a debutar a las órdenes de José Mourinho en el encuentro frente al Málaga el pasado mayo de 2013. «Jugar al lado de los jugadores del Real Madrid fue muy emocionante. Recibí una llamada en la que me dijeron que iba convocado, pero no sabía si iba a jugar. Mourinho me dio la enhorabuena y ahora hay que seguir trabajando», destacó el jugador a este respecto.

Sin embargo, el que fuera jugador de Fluminense no llegó a convencer a la dirección deportiva del cuadro de Concha Espina, por lo que no pudo seguir el mismo camino que Casemiro. En mayo, el Real Madrid decidió no ejercer la opción de compra que tenía sobre el jugador y prefirió apostar por el regreso de Dani Carvajal desde el Bayer Leverkusen después de que el canterano se convirtiera en uno de los mejores laterales de la Bundesliga.

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Gran rendimiento

Ante esta situación, su agente Jorge Mendes se puso manos a la obra a fin de encontrar destino al de Campinas, logrando que el Mónaco (que ya se había hecho con los servicios de otros de sus representados como Falcao, Moutinho, James Rodríguez o Carvalho) apostara por él en calidad de cedido.

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Ahora, cinco partidos de Ligue 1 después, el brasileño se ha convertido en uno de los grandes nombres propios de la competición francesa, mostrándose como un lateral de indudables cualidades técnicas, buenos fundamentos defensivos y facilidad para incorporarse al ataque, donde es constante foco de peligro para las defensas rivales. Hasta la fecha, su mejor partido fue en la jornada 4, cuando en la visita del recién ascendido y actual líder de la competición al Velodrome de Marsella tuvo una actuación para enmarcar provocando que los elogios se hayan disparado. Parece que el Mónaco ha encontrado una auténtica joya en bruto.

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