Suecia deja a España con la soga al cuello

Por Iván Vargas
3 min.
Ferran Torres pelea un balón con Emil Krafth @Maxppp

Derrota de España en Suecia que deja a los de Luis Enrique segundos de grupo con dos puntos menos (7) que el combinado sueco (9) pese a sumar un partido más. Cualquier pinchazo de aquí al final de la fase de clasificación podría ser determinante.

España y Suecia volvían a verse las caras. Lo hacían después de haberse enfrentado en la Eurocopa. En esta ocasión estaban en juego tres puntos vitales en la carrera por lograr la clasificación para el próximo Mundial. Tras el pinchazo ante Grecia de la primera jornada (1-1), el combinado de Luis Enrique no podía permitirse una derrota en su visita a Solna si no quería encontrarse ya con la soga al cuello después de tan solo cuatro partidos. Y el peor de los escenarios finalmente tomó forma.

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Enfrente estaba un combinado combativo, y no exento de calidad, tal y como quedó patente hace apenas unos meses. Sin embargo, las cosas se pusieron muy pronto de cara para los de Luis Enrique. Carlos Soler culminaba una buena jugada cuando apenas habían transcurrido tres minutos y adelantaba a la Roja (0-1).

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Dos goles en cinco minutos

Pero la alegría duró muy poco para los visitantes. Y es que tras la celebración, Suecia sorprendió a los españoles en la siguiente jugada y Alexander Isak igualaba el marcador por medio de un latigazo que sorprendía a Unai Simón (1-1). El tanto devolvía el partido a su inicio y ambos equipos frenaban su ímpetu en los siguientes minutos.

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Fue precisamente con el empate con el resultado con el que el choque se marchaba al descanso. España controlaba ligeramente, pero no terminaba de generar ocasiones de peligro. El equipo de Luis Enrique, dejaba también algunos síntomas preocupantes en su zaga y la incapacidad para defender a campo abierto.

España, con la soga al cuello

La segunda parte fue otra historia. Suecia se desperezaba y daba un paso al frente. Kulusevski era una pesadilla para la defensa española y su equipo lo agradecía. Y en medio de las embestidas nórdicas llegó el 2-1. Fue por medio de Viktor Claesson, que desnivelaba el casillero y dejaba a España en coma (57’).

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Con poco más de media hora por delante, Luis Enrique tiró de todo lo que tenía y paulatinamente fue echando mano de Adama Traoré, Marcos Llorente y Pablo Sarabia. Fue el extremo del Wolverhampton el que más peligro generaba merced a su velocidad, potencia y regate. Sin embargo, estaba muy solo.

España se volcaba pero no terminaba de encontrar portería mientras Suecia encontraba cada vez más huecos y daba una sensación de más peligro. De hecho, si no llega a ser por el cansancio de un Isak al que le faltó un poco de energía en momentos claves, la distancia podría haber sido incluso mayor. Los minutos pasaron y el choque terminó en una derrota para España que después de una Eurocopa de altibajos sigue generando dudas.

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Con esta derrota, y pese a que todavía queda mucho camino por delante, la situación de España se complica notablemente. Suecia encabeza la tabla con 9 puntos después de tres partidos mientras la Roja es segunda con 7 unidades y un partido más que los suecos. De este modo, y a estas alturas de la película, cualquier pinchazo puede ser vital.

Así queda la clasificación de los grupos

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