Un equipo inesperado para Kepa Arrizabalaga
Kepa Arrizabalaga centra las miradas. El guardameta tiene ante sí la posibilidad de cerrar un cambio de aires después de llamar la atención de un equipo de primer nivel.

La temporada 2024-2025 del Arsenal ha sido muy positiva, logrando la segunda plaza en la Premier League y firmando unas semifinales de Champions en las que le pudieron dar un susto al PSG en la vuelta, pero con el Manchester City compitiendo a un nivel tan bajo, se esperaba que quizá este hubiera sido el año en el que se hubiera vuelto a conquistar la liga inglesa.
Sin embargo, los gunners nunca estuvieron cerca del Liverpool de Arne Slot y en el entorno del Emirates queda esa sensación de oportunidad perdida, ya que la reconstrucción del Manchester City, liderada por los fichajes de Tijani Reijnders y Rayan Cherki, es inminente, y todo parece indicar que los reds también serán candidatos.
Además, en esta campaña se ha visto una versión camaleónica del Arsenal, pasando de ser un equipo alegre que vivía del fútbol generado por sus extremos (Saka y Martinelli), a uno sostenido sobre su pareja de centrales y su portero, cestas en las que ha puesto todos los huevos Mikel Arteta, consciente de que David Raya, Gabriel Magalhaes y William Saliva son élite mundial.
Delantero titular y portero suplente
Consecuentemente, ahora el plantel prefiere manejarse en resultados cortos, habiendo ganado muchos de los partidos por solo un gol, decisión también influenciada por la ausencia de un goleador de garantías, como podría ser un Viktor Gyokeres o un Benjamin Sesko que le darían un salto competitivo importante.
En este nuevo plan, en el que prima más lo defensivo, si David Raya sufriera algún percance físico o fuera sancionado, Arteta no contaría con un recambio adecuado, y por ello se ha mostrado interesado en incorporar a Kepa Arrizabalaga a la disciplina londinense, y ya ha iniciado los contactos con el Bournemouth, tal y como informa Fabrizio Romano.
La respuesta que han obtenido es que tiene una cláusula de 6 millones de euros en su contrato, un precio asumible que pagar por un portero con pasado en equipos de la talla del Real Madrid, el Chelsea o el Athletic Club de Bilbao.
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