Manchester City | La gran prueba de fuego en la carrera de Pep Guardiola

Era casi un semi-dios en el FC Barcelona, pero como ya hiciera durante su etapa de jugador en 2012 decidió hacer las maletas, tomarse un descanso y probar nuevos retos. Pep Guardiola sabía que nunca iba a volver a conseguir lo logrado en el Camp Nou en sus primeros años, pero tomó esa decisión y hasta ahora tampoco le ha ido muy mal.

En su debe con el Bayern Múnich queda no haber ganado la Liga de Campeones, pero a cambio conquistó otros títulos importantes como la Bundesliga o la Copa de Alemania. En verano tomaba las riendas del Manchester City, llegaba a un terreno desconocido como la Premier League, donde sus ideas y sistema iban a tener seguramente su mayor prueba. Pero las cosas comenzaron bien.

10 victorias seguidas que hicieron soñar a los aficionados, acallaron las críticas de la prensa que se dispararon tras la salida de Joe Hart, y consolidaron a los sky blues como grandes favoritos al título. Pero el castillo de naipes se ha venido abajo pronto, ya que en la última semana salió escaldado de la ciudad condal (4-0) y además ayer caía ante el Manchester City de José Mourinho en la Capital One Cup.

Razones de una crisis

Son en total 6 partidos sin conocer la victoria. Jamás desde que tomara las riendas del primer equipo del FC Barcelona el de Santpedor había acumulado una racha tan negativa. Tuvo malos momentos, perdió títulos importantes, pero no se le recuerda una crisis de tal magnitud. Y todo ello nada más llegar a un equipo nuevo y un campeonato desconocido, además de haber perdido ya un título (aunque sea el de menor importancia de todos).

¿Y cuáles son los motivos? Sus jugadores (con la excepción quizás de David Silva) no terminan de adaptarse a su sistema. Fichajes como John Stones, Ilkay Gündogan o Claudio Bravo se han mostrado erráticos. Estrellas como Kevin De Bruyne o Sergio Agüero no marcan las diferencias todavía como se esperaba, o como hicieran otros cracks de Guardiola en el pasado (Messi, Eto’o, David Villa, Robert Lewandowski, Robben…).

Aun así hay motivos para el optimismo en el Etihad Stadium, ya que todavía los citizens están en lo más alto de la clasificación de la Premier League y mantienen sus opciones intactas en Europa, donde siguen dependiendo por ahora de sí mismos. Tendrán ahora menos partidos por su temprana eliminación en la Copa de la Liga y podrán estar frescos para cuando llegue la FA Cup.

De momento el técnico ya ha afirmado que no cambiará su sistema ni sus principios, que prefiere renunciar hasta al cargo antes que traicionarse a sí mismo. Pero en el fútbol mandan los resultados, y si estos siguen sin llegar la situación puede ser cada vez más insostenible.