Aurelian Tchouaméni se convierte en imprescindible
De una temporada a otra el rendimiento de Aurelian Tchouaméni ha crecido ostensiblemente y se ha convertido en pieza imprescindible del sistema de Xabi Alonso en el pivote, actuando como sostén del equipo y ganándose el favor de un Bernabéu que antes le pitaba.
El Real Madrid ha firmado un inicio de curso bastante solvente, salvo por la goleada en el derbi contra el Atlético de Madrid por 5-2, que empaña el trabajo realizado hasta ese partido por los pupilos de Xabi Alonso. La realidad es que sin desplegar un fútbol especialmente vistoso se habían sacado los partidos adelante sin pasar dificultades, pero ahora se deberá volver a ganar el favor del Bernabéu después de tan sonrojante goleado.
Esa buena línea que estaba mostrando el equipo se explica mediante varios nombres, y en el apartado defensivo el de Tchouaméni es el protagonista, ejerciendo como anclas sin balón y sabiéndose involucrar lo justo y necesario en la construcción, dejando que Arda Güler o Dani Ceballos sean los que tomen la manija del equipo, una decisión inteligente que ya tomó Casemiro en su momento.
Aurelian participa menos con el esférico y todas esas pérdidas absurdas que hacían pitar al Santiago Bernabéu las ha llevado al mínimo, por lo que ahora le aplauden cuando luce sus virtudes físicas recuperando balones una y otra vez. Para ejercer una presión tras pérdida como la que quiere llevar a cabo Xabi Alonso, necesitas un pulpo en el centro del campo para que en caso de que rebasen a tu primera línea, cuentes con un jugador que llegue a las coberturas.
Seguro en la recuperación
La presencia física de Tchouaméni y el porcentaje de acierto que tienen los tackles es innegable y lo cierto es que no tiene un recambio natural en la plantilla, teniendo en cuenta que Alonso ve a Camavinga como un interior. De una temporada para otra Tchouaméni se ha hecho imprescindible y su cotización sigue al alza cuando en verano se le situaba más lejos que cerca de la capital de España.
Gran juego aéreo
Asimismo, el francés es uno de los baluartes del equipo en los balones aéreos, que si ya de por sí le cuestan a sus compañeros, sin su ayuda sería aún más sangrante la cantidad de tantos que se reciben de esta manera. Tchouaméni despejan muchas pelotas y ataca a otras tantas en área contraria, suponiendo una amenaza casi en cada córner, aunque debe mejorar su porcentaje de conversión.
Aurelian Tchouaméni, de 25 años de edad, disputó 52 partidos con el Real Madrid la temporada pasada entre todas las competiciones, superando los 4.300 minutos de juego, en los que marcó dos goles y repartió una asistencia.
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