El delantero inglés estaba llamado desde hace tiempo a ser el líder de los diablos rojos en el futuro. Y poco a poco cumple con los plazos.
Le ha tocado emerger en tiempos de crisis, con un Manchester United que desde 2017 no levanta un título y que no huele la Premier League desde el 2013. Marcus Rashford es en estos momentos el símbolo de la esperanza para los diablos rojos por varias razones.
La más importante es numérica, se puede palpar claramente y es que sus números han crecido de forma exponencial. Esta campaña que además está interrumpida, es la mejor de su carrera deportiva hasta la fecha, con 19 goles en 31 partidos oficiales.
Una gran proyección
Números por tanto aceptables, que indican que los diablos rojos tienen un delantero con mucho potencial. Falta explotarlo de la mejor manera posible, y aquí es cierto que por ahora no se vislumbra un proyecto claro que lo haga mejorar rodeado de buenos compañeros, aunque los rumores sugieren que en el próximo mercado puede estar la clave.
Además tiene una edad ideal para seguir creciendo, y cada temporada ha sabido adaptarse mejor a nuevos escenarios y ha logrado incrementar su incidencia en el juego ofensivo del equipo, hasta hacerse muy relevante y sellar una ampliación de contrato de figura.
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