La eterna contradicción de Sergio Herrera

Osasuna cuenta en sus filas con un portero sobresaliente, que a lo largo de la temporada le da más puntos de los que le quita de cara a su objetivo, que no es otro que volver a pelear por clasificarse para competiciones europeas, pero en ciertas ocasiones sus jugadas trascienden directamente en el resultado de manera negativa, como sucedió en el último encuentro ante el Elche.
Herrera viene haciendo un inicio de liga soberbio, ejerciendo de líder en el campo y exhibiendo sus reflejos felinos bajo palos, cualidades que si fuera capaz de mantener en el tiempo le podrían incluso abrir las puertas de la selección española. El gran problema que tiene son que sus errores son demasiado obscenos, pierde la concentración y es uno de los cancerberos que más fallos que derivan en gol promedia de la competición.
Sergio Herrera, de 32 años de edad, disputó 39 partidos con Osasuna la temporada pasada entre todas las competiciones, superando los 3.500 minutos de juego, en los que dejó ocho veces su portería a cero y encajó 56 goles.
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