Pese a la buena carta de presentación (como en la ida) de los partenopeos, el club lombardo ha impuesto su ley en estos cuartos de final de la Champions. Por tanto, su rival en 'semis’ saldrá del duelo pendiente entre Inter de Milán y Benfica.
La vuelta de cuartos de final de la Liga de Campeones daba su pistoletazo de salida en la sesión de este martes 18 de abril. Todo ello, además, con la presencia de un AC Milan que partía con la mínima ventaja de su primer asalto frente al Nápoles (1 – 0). Un líder de la Serie A que, como no puede ser de otra forma, confiaba en el espectacular apoyo de su fiel hinchada para lograr el billete para semis. En cuanto a los rossoneri, apurarán sus opciones en un entorchado que han conquistado hasta en siete ocasiones.
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Luciano Spalletti se presentaría de entrada (en busca de la remontada) con un Alex Meret que es garantía de éxito para los suyos como el guardián de sus dominios. Por delante, una línea de cuatro en el entramado defensivo compuesta por Giovanni Di Lorenzo, Amir Rrahmani, Juan Jesus y Mário Rui. Por lo que respecta a su parcela ancha, se decantaría por Piotr Zielinski, Stanislav Lobotka y Tanguy Ndombélé. En busca del gol, el trío de ases de Matteo Politano, Victor Osimhen y Khvicha Kvaratskhelia.
Pasando a la disposición táctica de Stefano Pioli en el ganador de la Serie A, apostaría por un Mike Maignan que ya frenó las acometidas de su adversario en San Siro. Un muro francés que, dicho sea de paso, quedaría resguardado por Davide Calabria, Simon Kjaer, Fikayo Tomori y Theo Hernández. La consistencia en la medular vendría con Ismaël Bennacer y Sandro Tonali, permitiendo que Brahim Díaz, Rade Krunic y Rafael Leao se asociasen en ataque con Olivier Giroud.
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El AC Milan cabalga a lomos de Leao y Maignan
La puesta en escena partenopea sería fantástica, siendo claramente superior hasta el ecuador de los 45 minutos iniciales. Mário Rui probaría fortuna con un buen zurdazo, aunque su golpeo sería desviado por Krunic. Acto seguido, también se asomaría con peligro un Kvaratskhelia que continúa mostrando un nivel fantástico en lo que va de curso. Maignan estaría muy atento, al tiempo que Politano no estaría precisamente acertado porque no encontraría portería en el Estadio Diego Armando Maradona.
En una de sus primeras aproximaciones al área local, los rossoneri dispondrían de una ocasión de oro para poner tierra de por medio en la eliminatoria (con un penalti). Pese a ello, Meret adivinaría las intenciones de Giroud y detendría su lanzamiento desde el punto fatídico. El arquero del Nápoles tendría que volver a intervenir poco después, mientras que la nota negativa llegaría en forma de doble lesión. Todo ello porque Hirving Lozano y Mathías Olivera reemplazarían a Politano y Mário Rui.
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En las postrimerías del acto inaugural, una espectacular galopada de Leao, zafándose de cada rival que salía a su paso, sería decisiva justo antes del descanso. A saber, el internacional luso serviría el cuero en bandeja con un pase de la muerte que culminaría Giroud (0 – 1). Tras la reanudación, Kvara realizaría una gran jugada individual que concluiría con un disparo que rozaría el larguero. También lo intentarían Olivera y el Chucky, junto con un Kvaratskhelia que se toparía con un inmenso Maignan que atajaría la pena máxima. Osimhen marcaría en el añadido (1 – 1), pero el AC Milan se llevaría el gato al agua con su billete a semifinales.
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