Eurocopa | Football’s coming home
Los ingleses consiguen vengarse de la derrota en el Mundial de Rusia en un sobrio partido frente a Croacia y suman los tres primeros puntos (1-0).

La Eurocopa es uno de los torneos más especiales que existen y los partidos de las primeras jornadas demuestran el porqué. Inglaterra, que cuenta con una de las mejores líneas ofensivas del torneo, se enfrentaba a Croacia, que si bien no cuenta con grandes nombres, salvando a la medular, es un bloque que sabe funcionar como un equipo y jugar sus cartas.
Wembley esperaba a las 15:00 a los dos combinados nacionales, que se habían encontrado por última vez en la semifinal del Mundial de Rusia, donde el equipo ajedrezeado pasó a la final tras ganar a Inglaterra en la tanda de penaltis.
Gareth Southgate ingenia un once atípico

Los Three Lions salieron con el dibujo habitual, en un 4-2-3-1 con Harry Kane como referencia ofensiva, aunque la sorpresa fue la inclusión de Kieran Trippier como Lateral Izquierdo, dejando a Luke Shaw en el banquillo y a Ben Chillwell en la grada, acompañado por Jadon Sancho.
El combinado británico se hizo rápidamente con el control del partido, avisando con un disparo al palo en el quinto minuto, obra de Phil Foden y un aviso minutos más tarde de Kalvin Philips, rematando un balón desde la frontal del área despejado por Dominik Livaković.
Poco a poco los croatas consiguieron tener más relevancia con el balón, desde el momento que la línea del centro del campo balcánico comandada por Luka Modrić sufría menos presión por parte de los leones ingleses. Sin embargo, la posesión croata ha sido estéril, provocando peligro solo a través de balones largos dirigidos a Ivan Perisić.
Inglaterra sentencia en la segunda parte
La tónica de la segunda parte continuó siendo la misma que la del final de la primera, con Croacia con el balón pero sin crear peligro. El partidó cambió con una individualidad genial de Kalvin Philips, que logró dar un pase final a Raheem Sterling para que se quedara en un 1 contra 1 frente al portero croata. Sterling puso así el 1-0 en el marcador.
A partir del gol inglés, volvió la versión más arrolladora del combinado británico. Mason Mount, el jugador más peligroso de Inglaterra, tanto desde el carril central como desde la parte izquierda del ataque de los de Gareth Southgate. En contraposición, las ocasiones del finalista del pasado mundial venían o de jugadas muy embarulladas o de jugadas a balón parado, que no lograron desafiar la portería de Jordan Pickford.
Más información