La reválida de Cole Palmer

El Chelsea ha firmado una temporada más que notable, consiguiendo todos los objetivos que se fijó al principio de la misma, y es que ha logrado la clasificación para la próxima edición de la UEFA Champions League al quedar entre los cinco primeros de la Premier League y además ha ganado esa UEFA Conference League en la que sólo valía con levantar el título.

Durante estos primeros doce meses del proyecto de Maresca al frente de la nave de los blues, se observan progresos evidentes, teniendo ya un once asentado en el que confía, y habiendo hecho una limpia considerable respecto a los casi cincuenta jugadores que tenían plantilla el pasado verano, si bien aún quedan muchos activos residuales de los que deshacerse en este mercado.

Una de las asuntos cristalinos en Stamford Bridge es que la cara del proyecto es Cole Palmer, una apuesta a ciegas que ha resultado realmente ganadora, tras hacerse con una de las estrellas de la selección inglesa arrebatándosela a un potencial rival directo como el Manchester City. Creyeron en Palmer cuando nadie más lo hizo y están obteniendo un rédito tremendo.

Talento, pero medio año tirado

Cole tiene esa luz especial de los elegidos. Momentos concretos e importantes, tiende a marcar la diferencia, como se ejemplificado en la portentosa actuación en la reciente final del Mundial de Clubes, o en la exhibición que dio en la final de la UEFA Conference League, pero sin embargo esta lucidez excelsa no se ha podido observar con continuidad en la segunda mitad del campeonato.

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Hasta el Boxing Day, Palmer era probablemente el mejor jugador de una Premier League 2024-2025 en la que Mohamed Salah estaba realizando unos registros de leyenda. Entre ambos estaría esa distinción, pero lo que se quiere señalar es que su nivel no es que fuera de uno de los múltiples iconos de la Liga, sino que era del jugador temido por cualquier rival en ese momento.

Sin embargo, desde enero se le apagó la luz, estuvo sin marcar unos cuantos meses, y se volvió a dudar de su figura, por lo que si realmente quiere dar el siguiente paso, que es el de establecerse en el top cinco de la Liga, en esta campaña 2025-2026 no debe bajar el pistón ni un solo mes, ya que en la regularidad se halla el camino a la excelencia.