La negativa de Adriano a pesarse en la báscula antes de cada entrenamiento, rutina que siguen el resto de los integrantes de la primera plantilla, ha resultado determinante para que el entrenador le aparte del equipo y provoque su salida del Corinthians.
«Al final de la tarde, el club Corinthians y el atacante Adriano decidieron, de común acuerdo, terminar el contrato de trabajo entre las dos partes, que era válido hasta junio próximo», indicó un comunicado hecho público por el cuadro brasileño.
De esta forma, el atacante se despide del cuadro paulista tras once meses y medio en los que se ha pasado más tiempo en el quirófano y en sesiones de recuperación que en los terrenos de juego (apenas ha disputado 8 partidos en los que ha sumado 2 goles).
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