El Real Betis recupera terreno en la Europa League tras superar a un combativo Sparta de Praga que llegó a ponerse por delante en el marcador. El emergente Assane Diao y el renacido Isco firmaron los goles que certificaron la remontada de un equipo que, sin ser brillante, puede al menos agarrarse al talento individual de esta pareja.
Tras caer por la mínima ante el Rangers en su estreno en la competición, el Real Betis abordaba hoy su segundo duelo de Europa League con la obligación de ganar. Los verdiblancos se medían al Sparta Praga, conjunto que saldó con victoria su primer choque, ante el Aris (3-2), y que vive instalado en un buen momento de forma que le ha permitido situarse también al frente de la liga de su país.
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El arranque del duelo resultó sorprendente. Y es que, lejos de adoptar un papel expectante, el cuadro visitante saltó al verde dispuesto a presionar con intensidad y lanzarse al ataque a la mínima ocasión. De hecho, tras una de sus primeras recuperaciones en campo propio, los de Brian Priske trenzaron una jugada en tres toques que acabó con el balón en el fondo de la red bética. El gol llevó la firma de Veljko Birmancevic, quien supo filtrarse a la perfección entre los dos centrales y finalizar con tino ante una salida no muy académica de Rui Silva (minuto 3).
Por fortuna para los locales, solo seis minutos después, el portero checo Peter Vindahl cometió un error garrafal al intentar alcanzar un balón en la frontal del área y permitió al entonadísimo Assane Diao devolver el duelo a casi su punto inicial. El canterano, que ha entrado como un tiro en la primera plantilla, perseveró en la idea de ir a por un balón que parecía inalcanzable y obtuvo como el premio el de empujar a puerta vacía el tanto del empate.
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Tras el 1-1, el encuentro, que había arrancado intenso, se serenó considerablemente. Eso sí, en contra de lo esperado, fue el Sparta quien, hasta el descanso, más tiempo mantuvo la posesión y más hizo por alcanzar el área rival. De hecho, en esta fase del duelo, si los de Heliópolis gozaron de alguna tímida oportunidad fue más por el empeño de Vindahl de complicarse la vida en cada acción que por sus méritos.
Isco completa la remontada
Consciente de que un empate podía resultar un marcador muy justo para su suerte en la fase de grupos, el Real Betis encaró el segundo acto con energías renovadas y la firme disposición de llevarse la victoria. Manuel Pellegrini renovó por completo la banda izquierda dando entrada a Abner y Ayoze Pérez, en lugar de Juan Miranda y un errático Ez Abde, y el equipo comenzó a dar la sensación de estar más compensado y no depender tanto de algún ataque de inspiración de Isco o las carreras de Diao. Eso sí, este primer paso al frente de los verdiblancos no inquietó en exceso a un valiente Sparta que, sin tener tanto dominio, siguió mostrando un actitud combativa y aprovechó cualquier descuido de su rival para proyectarse al ataque con peligro.
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Superada la hora de juego, los béticos volvieron a pisar el acelerador en busca de un gol que no terminaba de llegar y, ya sí, comenzaron a gozar de ocasiones realmente claras. Sea como fuere, hubo que esperar hasta el 80 para que, tras un envío desde la derecha, Isco conectase un cabezazo certero y subiese el 2-1 al marcador. El malagueño, que se está reconciliando con el fútbol en el Benito Villamarín, puso así la guinda a otra actuación de nota.
Aunque lo intentó hasta el final, el cuadro visitante no fue capaz de igualar de nuevo la contienda y el Betis pudo sumar así sus tres primeros puntos en esta fase de grupos. De momento, y a la espera de que su juego colectivo mejore, los andaluces han encontrado en la dupla Isco-Diao un buen clavo al que agarrarse.
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